La visión de Georges
Mi trabajo no es como el de un pintor o un escultor, que termina sus obras en su estudio y luego las envía a galerías o museos. Todas mis instalaciones son personalizadas, y las llevo a cabo tras meses de preparar los componentes en el lugar de la exposición, que se convierte en mi estudio. Es un diálogo de solicitud y propuesta.
—Georges Adéagbo, 2023
Georges Adéagbo crea instalaciones todos los días. Algunas son más elaboradas que otras, pero cada una es una reflexión personal, una cavilación sobre los asuntos y los encuentros que afrontó ese día. Formado en Derecho y Administración de Empresas, el artista comenzó a crear este tipo de instalaciones de diferentes escalas y complejidades cuando regresó a Cotonú, Benín, tras la muerte de su padre en 1971. Su familia lo presionó para que se quedara, así que para sobrellevar su regreso se dedicó a dar paseos en solitario, a buscar objetos—tanto desechados como perdidos—que le llamaban la atención y a colocarlos en los terrenos de su recinto. Durante 23 años, el artista escribió sus pensamientos y combinó estas notas con objetos de interés, recortes de prensa y artefactos de la vida cotidiana para crear colecciones diarias. A raíz de un encuentro fortuito con el curador francés Jean-Michel Rousset en 1993, participó en la exposición La Route de l’art sur la Route des esclaves en Besanzón, Francia. Cinco años más tarde, en la Bienal de Venecia de 1999, se concedió una Mención Honorífica a La historia del león de Adéagbo, una instalación de un día en la que se analizaban las contribuciones intelectuales y materiales de África a la historia europea, y en particular a la veneciana. El curador independiente Stephan Köhler, quien desde entonces ha sido un estrecho colaborador y promotor de Adéagbo, fue quien lo invitó a crear esta instalación.
En las últimas décadas, Adéagbo ha mantenido una sólida presencia internacional con exposiciones desde Filadelfia hasta Tokio. Cada exposición ha sido diseñada específicamente para cada lugar. Crear para liberarse: Abraham Lincoln y la historia de la liberación de esclavos en Estados Unidos se instaló por primera vez en el museo y sitio histórico President Lincoln’s Cottage con la idea de que el conjunto pasara a formar parte de la colección del Smithsonian National Museum of African Art. Esta exposición es la visión del artista para este museo.
Crear para la libertad: Georges Adéagbo y Abraham Lincoln
Images (captions at end of doc)
–preparatory drawing by Adéagbo
–Adanhoumè reproducing Adéagbo sketches
–installation at Lincoln’s Cottage
. . . Abraham Lincoln, the man who above all cared about reforging the union, not by force and repression, but by the warmth of his feelings and the generosity of his heart.
—Georges Adéagbo, 2023
Muchas de las instalaciones de Adéagbo son reflexiones sobre figuras históricas que han transformado la sociedad. Para él son como retratos. Al promulgar la Proclamación de Emancipación, Abraham Lincoln cambió el rumbo de la historia de Estados Unidos, y sus actos reverberaron en todo el mundo. Mucho tiempo después de su muerte, aún no se ha logrado la plena emancipación para todas las personas, pero esta instalación nos invita a pensar en sus implicaciones y legados.
Adéagbo creó su primer retrato público de Abraham Lincoln en el año 2000. En Abraham—L’ami de Dieu (Museum of Modern Art, Nueva York), se entretejieron narraciones visuales y textuales que ponderaban los conceptos de sacrificio y libertad, vinculando la liberación de esclavos en Estados Unidos con los movimientos de liberación a escala global.
Crear para liberarse comenzó en 2021 como una beca del programa Smithsonian Art Research Fellowship, en la que Nancy Bercaw, curadora del National Museum of American History, le enseñó a Adéagbo el reloj de bolsillo de oro de Lincoln, su abrigo negro desgastado y moldes de su cara y sus manos. El artista también pudo apreciar un anuncio de la muerte de Lincoln, litografías de Lincoln con su familia y sátiras escritas por sus oponentes. Durante su investigación, Adéagbo creó collages preliminares, a menudo en papel de estraza, en los que incluía fotocopias, bocetos y reflexiones manuscritas sobre sus hallazgos. Al regresar a Benín, le encargó a Benoît Adanhoumè, pintor radicado en Cotonú, que reprodujera algunos de estos trabajos. Al ver imágenes de Lincoln a caballo, sin guardaespaldas, Adéagbo se inspiró para encargar al escultor beninés Hugues Hountondji una escultura de Lincoln montado a caballo.
Cada una de estas esculturas, pinturas, trajes de baño, objetos encontrados, libros y notas albergan recuerdos de canciones que se han tocado, de piscinas que se han visitado, de pensamientos escritos y leídos. En conjunto, estos elementos se despliegan como un mapa de la mente de Adéagbo, que nos invita a recorrer sus pensamientos y a encontrar asociaciones y significados por nuestra cuenta.
Karen E. Milbourne
Curadora principal del museo